Miss Sushine, La Pequeña Miss / o, cuando llega la Hora de los Perdedores
Puede que por el título alguien crea que se trata de una peregrina comedia ligera, no obstante es una maravilla por lo entretenida, singular (sobre todo esto) y aleccionadora historia; con cierto condimento de humor negro, que al igual que la sal y la pimienta hacen de la experiencia algo que se recuerda con gusto. Desde los créditos tiene la virtud de mantener el pulso del expectador en un crescendo de emociones que no decae en ningún momento. Trata de una niña no precisamente muy agraciada "Olive" que, accidentalmente, clasifica para participar en un concurso de Niñas Misses en la costa californiana, para lo cual tendrá que cruzar el país de este a oeste acompañada -para bien o para mal- de su errática fam ilia, su papá, un escritor de un libro de autoayuda al que todo le sale mal y que hace lo imposible por no poner en evidencia sus fracasos, su hermano adolescente de actitud repelente que cultiva sus obsesiones en medio de la más cáustica y contest