Araucaria de Paraná / Un bosque para Lía y Miguel

 

La Araucaria es un árbol del sur de América Latina, aunque su aspecto de gigantesco paraguas invertido se puede apreciar

pino Bunya bunya

también en Australia donde existe una variedad autóctona, la Araucaria bidwilli conocida como pino Bunya bunya cuyas "hojas" son estrelladas ( 1 ). No obstante, la imagen de las araucarias, por lo regular remiten a la América austral. 

Son muchos los aspectos que podemos comentar de este pino, pero el más resaltante es lo magestuoso de su imagen.

Antes de seguir, debemos aclarar que al hablar de Araucaria, la mente remite a

A. columnaria

una especie muy difundida en el paisajismo urbano: La Araucaria columnaria,  también llamada pino de Norfort, pino de Cook o pino de Nueva Caledonia. Es natural de Oceanía y, lo sorprendente es que es una especie netamente tropical, aunque, de fácil adpatación a otras latitudes lo que la hace muy familiar y que, a diferencia de sus primas americanas, ella mantiene sus ramas en forma de cono a lo largo del tronco. A ella ya le dedicamos un artículo en este blog ( 2 )

Lo importante es que estamos al frente de la famila de las araucarias y se trata de un grupo de especies a las que hay que diferenciar de manera concienzuda, para eso, hay literatura especializada, por los momentos solo les dejo este esquema:

Aclarado esto, no puedo hablar del pino de Brasil sin antes mencionar al pino chileno, Araucaria araucana que en el

esquema sería el octavo patrón. De hecho, esta especie es tan representativa, que el género recibe el nombre de Arauco, zona regada por el río Biobio en Chile. En el pasado se designó con el segundo nombre de imbricata o de chilensi,  y sus  nombres comunes son: Pehuén, Piñonero, o Monkey Puzzle tree (Rompecabezas de mono) nombre dado por los ingleses debido a la dificultad que encontraría un simio para encaramarse en él. 

Conífera endémica de los Andes chilenos y de la Patagonia chileno-argentina. Árbol sagrado en la cultura mapuche, no

A. arauca, Pehuén juvenil

solo por la harina que se puede optener de sus semillas o piñones, sino también por su aspecto soberbio, tanto así, que las ceremonias más solemnes de la tribu se deben efectuar a su sombra, con la convicción de que, al abrigo de ese testigo milenario, es cosa vana decir mentiras.

Acá les dejo un esquema completo acerca de la araucaria chilena.

La otra especie,y a la que está referido este artículo,  es la Araucaria angustifolia, el tercer patrón del esquema. Especie endémica del sur de Brasil, en especial del estado de Paraná,

de hecho, el nombre de la capital de ese estado, Curitiba, proviene del vocablo guaraní Curi: pino y Tiba: región, "región de los pinos o piñeros".Si alguna vez visitan Curitiba, verán que los alrededores de esta ciudad, aún hoy en día, están rodeados por grandes bosques naturales de esta conífera.

 

 Pero esto no impide que el área de este árbol abarque a otros estados de Brasil, como los del sur e incluso, los del norte como las regiones altas de Sao Paulo y de Minas Gerais, además de una provincia de Argentina y el oriente de Paraguay. 

Zonas endémicas del pino de Paraná

El otro nombre que se le dió a esta especie es brasilensis y sus nombres comunes son: pino de Paraná,  Piñero, Curi, pino de Misiones ( en referencia a la provincia argentina) o Árbol de Candelabro, pues su semejanza a la

Menorah o candelabro del templo de Salomón, es muy marcada, al terminar sus ramas en copos tal como el candelabro de los siete brazos, no obstante, esta forma la comienza a adquirir cuando ya ha revasado los

veinte años de edad. En este punto es bueno aclarar que la diferencia entre el árbol juvenil y el de más de veinte años es tal, que parecen dos especies distintas. Atención a este esquema:

Araucaria de Paraná 

Su crecimiento es lento, algo así como diez centímetros anuales hasta alcanzar el metro de estatura y de ahí en adelante  casi un metro anual en la segunda década de vida. Esto, como pueden ver, hace que sea un árbol muy senil, con centenarios de años en promedio, incluso, se han reportado individuos que superan los mil años. Sin duda, una suerte de secoya gigante del hemisferio sur. 

Además puede alcanzar alturas superiores a los cincuenta metros,como podemos ver en esa foto de arriba tomada en Maringá, donde se compara su altura con el caminante que se encuentra en el ángulo inferior derecho.

La Araucaria es una superviviente, una gigante que logró sobrepasar el período jurásico y puede resistir temperaturas extremas, tal como las nevadas de los altos de Santa Catarina y Rio Grande do Sul ( 3 ) 

No obstante, su altura, hay artesanos que se dedican a sembrarlo con la técnica del bonsai, tal como lo podemos ver en estas fotos:

En el estado sureño de Paraná, en Brasil, se le considera un emblema, a tal punto que hay un municipio y una ciudad llamada Araucaria, y en Brasil hay un día dedicado a este pino: el 24 de junio.

Tronco de Araucaria centenaria

El árbo también es una fuente de alimento debido a las

almendras que produce. Ellas forman parte del llamado piñón
, una suerte de granadina como del tamaño de un balón de fútbol producido en los meses de junio y julio, y en la que cada semilla es una de estas almendras. El árbol comienza a producir entre los 12 y 17 años de edad, aunque existen técnicas experimentales que han logrado reducir ese tiempo a seis años ( 6 ) Cada árbol puede dar desde 100 y hasta 900 piñones por temporada  ( 8 ) Estas semillas son tratadas y molidas para formar

una harina con la que se elaboran muchos platos típicos de la región.

El mayor problema que enfrenta esta especie es que, en los estados con tanta pujanza de la agroindustria, como son los del sur de Brasil, la deforestación, debida sobre todo al avance constante de la frontera agrícola sobre los bosques naturales de la conífera, la ha ido relegando a bosques dispersos y asediados por el agro.

Es por eso que las gobernaciones han ideado planes para preservar el hábitad del árbol en equilibrio con el desarrollo económico, algo difícil pero no imposible. Una de estas medidas es la replantación de "piñeros" como parte de franjas o linderos de los mismos predios agrículas que le han arrebatado sus bosques originales, o la "compra" o "alquiler" ( ) de áreas de vegetación primigénia o la reducción de impuestos a las empresas que fomenten estas políticas.

Lo importante es que este gigante entre los árboles siga dando su sombra por mucho tiempo

Dicho esto, me voy a permitir indicar algo personal. 

Desde que nuestra familia llegó como migrante a esta cuna de la Araucaria brasileña quedamos enemorados de esa preciosidad de árbol, por eso nos hemos propuesto hacer lo que podamos para fomentar su siembra e inculcar esa iniciativa en las nuevas generaciones. Por supuesto, sin olvidar nuestros orígenes, es decir el desierto coriano de Venezuela

 En vista de eso, donde quiera que estemos nos hemos dedicado a plantar cáctus con la idea de que los niños no olviden de dónde vinieron sus padres ( 9 )  Esto lo pueden ver en la siguiente foto, donde sembramos un cardón al frente del apartamento. Por cierto, pueden ver a Bachi, la cocker española que vino rodando con nosotros desde Venezuela, observando desde la ventana.

Con esto en mente, en junio del 2020, acá en Maringá —lejos de Curitiba, pero en el mismo  estado de Paraná— iniciamos la siembra de un pequeño vivero de araucarias. Para ello pusimos las semillas  en un envase con agua por cuatro días y elegimos solo las que permanecieron en el fondo. La germinación se produjo luego de los 70 días, puede ser hasta los 90. Luego serían plantadas en un sitio bien estudiado ( 5 ) 

Es bueno aclarar que sembrar araucarias en Brasil no es algo fácil, y la razón es que, luego de sembradas, existe un sistema burocrático que impide su tala, por eso es importante elegir muy bien el sitio. Ese sitio debía estar listo para el año siguiente. 

Por fortuna,pudimos encontrar ese lugar, debido a que se trata de una ciudad planificada donde los bosque rivereños de los cursos de agua que la surcan, están debidamente protegidos, incluso con su flora primigenia.

Pero también se han tenido que rescatar áreas que habían  sido usadas como campos de labranza o como predios ganaderos. A estas zonas se les ha estado reforestando por etapas

Así que nos ubicamos en la que había sido invadida por pastos y que estaban preparada para comenzar a plantar árboles, es decir, la más próxima a la calle. 

Para junio del 2021, iniciamos la siembra de las plántulas de araucaria. Antes de continuar, debo agradecer a las personas que nos proveyeron de éstas, como es el caso de Joamar Ferreira Dos Santos, mi compañero de trabajo y, sobre todo, otro amigo que no quiso ser identificado, pero que también fue de ayuda para la provisión de plántulas. 

A las damas Antonia María Ferreira Barrios (la foto de arriba es la de su predio) y Silvia Elena Prado, quienes tuvieron los arbolitos en sus casas por muchos meses, a Alicia Marina Ballera Zapata, a quien, todavía le debemos una escardilla que rompimos trabajando en el bosque, y al pastor Erick y su esposa Jahdy directores de la fundación "Sendas" quienes plantaron varios arbolitos en la chacra institucional

Las plantas fueron ubicadas a prudencial distancia del bosque, de forma tal que pudiesen aprovechar su sombra y estar separadas lo necesario del predio en preparación, de forma tal que el trabajo mecánico sobre el terreno no las deteriorara. 

Además, colocamos en la horqueta de una vara, al lado de la plántula, la información de la especie y su importancia

personal y colectiva de la misma, de forma que los equipos de reforestación la tuviesen en cuenta en el momento de su trabajo. Por otro lado, sabiendo que nos faltaría tiempo para el riego regular, implementamos un sistema artesanal, automático y dosificado de riego, usando botellas plásticas de dos litros ( 7 ) y limpiando de forma periódica los alrededores de cada planta

Pero, a pesar de todas las previsiones, hubo algunas

plántulas que no sobrevivieron, pues el gamelote, nacido con las lluvias, las ahogó. Otra fue cortada de forma accidental en las labores de limpieza mecánica llevada a cabo por la municipalidad 

Antes de seguir, es bueno dejar en claro, que todo este esfuerzo de triunfos y fracasos,  está destinado para sembrar el amor a estos árboles en Lía Isabel y Miguel David

Acá vemos a Lía en los fríos días de junio del 2021, en que fueron plantados los primeros arbolitos. De hecho, en esta próxima foto, está Lía, sostenida por Sulmely, su mamá, para evitar que se abalance sobre su plantita.

En cuanto a Miguel David, todavía no había nacido para ese momento, pero estaba en gestación. Acá les dejo una foto de sus padres frente a su arbolito

Pero, para que lo conozcan, acá les dejo una foto de un año después junto a Felimar, su mamá, cuando él tenía más de seis meses de edad, en junio del 2022

Y volviendo a junio del 2021, cuando fueron plantados los primeros árboles, en forma de una ceremonia familiar en la que también participó Adriana Cassorillo, Alexander Cardoso y sus hijos Arturo (con su uniforme de Bátman) y Héctor, digamos que nuestra otra familia en Maringá.

Dos años después, en junio del 2023, insistimos en sembrar otra araucaria en el parquecito cercano al bosque, donde habían cortado la anterior de forma accidental. Para ello se buscó el sitio a conciencia. Veamos las fotos

Esta plántula es de junio del 2020 y para el momento de ser plantada, es decir, en junio del 2023, tenía 55 centímetros

Acá vemos a Lía con su abuela "Puma" ( Súlmar )  plantando su araucaria.

Agregando agua al sistema de riego dosificador automático 

Vamos a dejar ahora otras fotos del terreno, el bosque y de Shiro, el schnauzer intenso, que en algún momento también nos "ayudó" a sembrar las araucarias

Para  tener presente al desierto de Coro, también sembramos un cactus, en ese bosquesillo urbano de Maringá

En esta foto, Lía se asoma al terreno donde se plantaron los primeros arbolitos regados por la lluvia que, a la sazón, se encuentra al frente de su escuela.

Acá abajo se observa una araucaria de Paraná al lado derecho y al fondo, en el lado izquierdo, una araucaria columnaria o pino de Coop

Acá bajo tenemos a Bachi en la jungla primigenia, tratando de husmear al jaguar. Para fortuna nuestra, no estaba por ahí

Para finalizar les dejo la imagen de las manitas manchadas con la tierra roja de Maringá, lo que me evoca las palabras de la novela "Lo que el viento se llevó" de Margaret Mitchell cuando habla de "la tierra roja de Tara" que es como decir Macondo o la legendaria Ítaca.

( 10 )

( 1 ) Para  más acerca de la australiana Bunya bunya

( 2 ) Pino de Cook, un pino con espíritu tropical

( 3 ) Nieve en Brasil

( 4 ) 

( 5 ) Cómo plantar una araucaria aquí y también acá

( 6 ) Manipulación genética y producción precoz  de piñones acá

( 7 ) Sistema artesanal de riego automático

( 8 ) Araucaria con 900 piñones por temporada

( 9 ) Flora del desierto  de Coro bosque espinoso semiárido

( 10 ) La tierra roja de Tara de "Lo que el viento se llevó"

Fuentes:

https://yurakuna.blogspot.com/

Chilebosque. 2016. Ficha de descripción de Araucaria araucana. Acceso 

en línea http://www.chilebosque.cl