Tigrero

  El joropo es el baile que identifica al llano  — esa extensión de sabanas que abarca buena parte de Venezuela y Colombia   ( 1 ) —  . Se trata de una música telúrica, más bien, agreste, de letra contestaria propia para los desafíos.  El joropo es avasallante y pendenciero como sus letras. Y en cuanto a sus características, posee diferentes ritmos o "ai res", con nombres muy pintorescos, a saber:  Quirpa, periquera,   zumba que zumba, carnaval llanero, matapalma, catira, gaván, seis por derecho, seis numera ' o , quitapesares, merecure, San Rafael, pajarillo, chipola, en fin. El caso es, que se trata de un sonido recio. Oigamos, por ejemplo, este joropo en aire de gaván, interpretado por Rummy Olivo La presentación fue en El Poliedro de Caracas, el aforo más grande de Venezuela, en donde "La Flor de Zaraza", título que le adjudicara el legendario Simón Díaz  ( 2 ),  demuestra su poder de improvisación en el canto recio, su dominio sobre la totalidad del escena

Guapa por duplicado Para el lic. Humberto Márquez, la voz narradora de estos hechos.    Me encontraba en el aeropuerto Las Piedras, de Punto Fijo, esperando mi vuelo a Maiquetía. Cuando una fémina, que levantaba un revuelo por donde andaba, me hizo abandonar la lectura. Se trataba de María Corina Machado quien, por buenamoza, tiene a quien salir, pues es hija de esa deportista, médico y, sobre todo, belleza paraguanera que es Corina Parisca Pérez de Machado. Me saludó con efusión y nos despedimos con un beso. Entonces ella traspasó las puertas de vidrio hacia la pista para abordar un chárter que la llevaría a Caracas y así, continuar sus trajines de activismo político . Quedé extasiado viendo como el brisote paraguanero, que dobla los cujíes y derriba empaliza’s, hacía que sus ropas se estremecieran mientras trataba de arrebatar del piso su frágil figura. Abordó la pequeña nave junto a otras personas. Yo, entretanto, esperaba verlos carretear y despegar. Pero pasaba el tiem

  Detrás de cada canción suele haber una historia que puede ser tan increíble como el guión de una película.  Acá nos vamos a referir a una de ellas. Se trata de una madre soltera venezolana que  — por razones políticas que han generado un caos en su país —   tuvo que emigrar "via terrestre" hasta Santiago de Chile. En esta nueva ciudad se dedicó a trabajar como cantante de mariachi y para ello aprendió a tocar la vihuela, el instrumento rítmico ranchero por excelencia. Así estuvo por un tiempo hasta que sus responsabilidades maternas la obligaron a dejar el grupo para ponerse a cantar sola en los vagones del metro. Acá, el primer video producido por unos, también venezolanos, llamados Aspirantes cmc, que la grabaron en plena faena, cuando ella era una simple "cantante callejera". En un momento, sus colegas, cantantes del metro, la animaron a participar en la franquicia chilena de  The Voice.   Así que se inscribe y envía un video. Luego de dos meses, es llamada p

  Cuando hablamos de ese género musical estruendoso que llamamos "salsa", pensamos en los sitios geográficos de donde proviene tan variada mezcla, sobre todo en las llamadas "capitales de la salsa", a saber: Nueva York, San Juan de Puerto Rico, Caracas, Miami, La Habana y Santo Domingo, pero solemos dejar por fuera una ciudad clave: Cali. Para componer ese entuerto, vamos a dejar acá  una pieza compuesta por Jairo Varela    (1949 − 2012 )   que fue publicada en 1984 en el álbum "No hay quinto malo" del grupo Niche y que acá oiremos en la voz de Gilberto Santa Rosa , "El Caballero de la salsa" y de Andy Montañez  "El Señor deTrastalleres", este último, un decano en el género con una trayectoria que parte desde los comienzos de la década de los sesenta siendo la voz de El Gran Combo de Puerto Rico, La Dimensión Latina y de su propia orquesta. Oigámoslos aquí en la Feria del Valle del Cauca, en  Cali,  diciembre del 2013: En esta ocasión,

  La canción que nos ocupa fue escrita por    Jesús M.   Arozamena y la música es del argentino Palito Ortega  quien la interpreta junto a  Rocío Durcal  (1)  La pieza fue publicada en 1967 y es el tema de la una película del mismo nombre. Se trata de una comedia musical que, para ese momento, vísperas del festival de rock de Woostock  (2)   ya   era... digamos que un poco cursi, y ... ni qué decir de los estándares morales actuales. No obstante, a pesar de ser algo tan a lo "novelita rosa", podemos rescatar que ese aire de "inocencia" de la cinta se traduce en la  nostalgia de la ni ñez y la juventud de dos generaciones.  Pero convengamos en que la canción es muy pegajosa y, en lo técnico, es notable ese final donde Palito sostiene una nota grave y Rocío va ondulando los registros agudos sobre esa base.  Les voy a dejar acá la última escena de esta comedia romántica para que aprecien ese final.  NOTA: Por favor, no intenten repetir eso de dejar caer una carretill

  "Momentos decisivos" es el blog de Sara Alonso Rodriguez. Ella y su esposo son unos amantes de la naturaleza que invierten tiempo en explorar los alrededores de su provincia y de todo lo que pueden. Ese amor por la ecología se lo han sembrado a sus hijos y nietos tal como se siembra un árbol que sabemos, nos sobrevivirá por siglos. Sus fotos son, no solo profesionales, sino también encantadoras. Veamos: Alcolnocal de Cobrana La Rambla desde arriba Bosque en Moal Robla y moto Collado del Coito Mantel de navidad Sendero en Irati Pueblito de Carande Lo alto del sendero. Ahora a bajar Sara abrazando a uno de sus grandes amores Camino en la colina de Pederilla de Moros Cubillas de Alba http://sara-momentosdecisivos.blogspot.com

"El cuarto de Tula" es una guaracha compuesta por Sergio   Gonzalez   Siaba   ( 1915 − 1989 )  publicada en 1997 por el Buena Vista Social club pero acá la vamos a oír presentada por la agrupación de Barbarito Torres y éste a su vez  interpretando el laúd cubano. Este instrumento tiene el mismo nombre de uno de sus antiguos predecesores europeos    pero su forma diferente, con notas más graves lo hacen muy distinto a su antiquísimo tocayo, eso se debe a que es más afín con la bandurria que con el mismo laúd. Eso sí, su  formato medieval le da una apariencia anacrónica  inconfundible.  Y al igual que el tres cubano, se trata de un instrumento característico  de la más grande de las Antillas.  Laúd renacentista  El Laúd es eminentemente melódico, por eso requiere el concurso del tres para abrirle camino con el tumba ' o , es decir, ese sabor percusivo que caracteriza a la música del Caribe. Tanto el laúd, como el tres cubano, perdieron vigencia en los a ñ os 60 a raíz de