Wall.e & Eve / o la ternura electromecánica
A Tamaris Navarro de Salgado, amiga entrañable Mucho antes de que Isaac Asimov acuñara la palabra "robótica" y enunciara sus tres primeras leyes, ya estaba en el tapete la discusión de que si un robot podía o no llegar a tener sentimientos. Creo que pensar algo como esto es simplemente la aspiración humana de una obra a nuestra "imágen y semejanza" otro indicio de que nuestro instinto creador viene dado por el hecho de que el hombre e s producto de la creación de un Ser Superior. Pero -teología aparte- esa inquietud de que un robot pueda tener capacidad de sentimiento fue abordada de forma dramática por Steven Spielberg en su película "Inteligencia Artificial" pero en Wall.e se cambia el dramatismo desesperanzador por la ternura electromecánica. Se trata de un robot herrumbroso como una caricatura cúbica. su nombre viene del acrónimo Waste Allocation Load Lifter-Earth , algo así como Montacarga compactador asignado a deshe